La presidenta de la Asociación Empresarial del Camp de Morvedre (ASECAM), Cristina Plumed, a punto de cerrar la puerta de este 2023, repasa lo que ha dado de sí este ejercicio que ahora se extingue y recuerda que sigue plenamente vigente su pronóstico de finales de 2022: «hace un ya decía que nos enfrentamos a un mundo donde los cambios tecnológicos, laborales, legislativos y sociales, no solo están a la orden del día, sino que, además, se están produciendo a una mayor velocidad, lo que provoca cierta sensación de incertidumbre sobre lo que vendrá en un futuro. Lo cierto es que, un año después, la afirmación continúa aplicándose perfectamente a la realidad actual».
En esta línea, afirma la lideresa de la patronal que «siguen produciéndose los incrementos de costes de materias primas, también energéticos, y con una necesidad ingente de crecer en productividad. Son muchos los retos que tenemos por delante, tanto en la economía local como en la valenciana».
Además, Cristina Plumed recuerda que el empresariado de Sagunto no puede obviar la globalización: «En un mundo global, no podemos centrarnos en las buenas noticias locales, pues, aunque la implantación de la gigafactoría continúa al ritmo esperado y ya se percibe crecimiento económico y más efecto tractor de inversiones. Nuestro sector industrial debe hacer una transformación necesaria hacia la descarbonización, para esta transformación se necesitan ayudas y grandes alianzas entre las distintas industrias, pero ya estamos trabajando en ello».
Respecto a las transformaciones, la primera directiva de ASECAM pone de relieve que se trata de un concepto muy amplio, ya que: «se deben transformar procesos, no sólo a nivel tecnológico, también, en algún caso, con los procesos de producción y cómo se prestan los servicios, la sostenibilidad es prioritaria en todos los sectores y los mercados están cambiando su demanda, por lo que estamos ante una nueva era de consumo y nuestro sector industrial y logístico ya trabajan en ello».
En este contexto, Plumed destaca que habrá empresas, como la futura gigafactoría, que: «nazcan específicamente para cubrir nuevas demandas, y otras empresas ya se están transformando o se transformarán. Desde ASECAM debemos acompañar y actuar ante las administraciones, locales, autonómicas, y nacionales, para poder transmitir cuáles son las necesidades de nuestra industria en este momento clave para la economía. Si estas empresas no cambian sus procesos, si no invierten, si no se descarbonizan, aquí cerrarán en un futuro no tan lejano», advierte la jefa del empresariado.
Más adelante, Plumed resalta que: «Estamos viviendo un tiempo apasionante de cambio, en el que los agentes sociales y económicos, además de la administración, debemos entender nuestro papel y trabajar como facilitadores. No debemos olvidar —prosigue— que nuestro tejido empresarial es de pymes, micropymes y autónomos, y nadie se puede quedar atrás, todas las empresas deben crecer, invertir en nuevas tecnologías y deben ser sostenibles, debemos tener un tejido empresarial fuerte y armonizado».
Prepararse para el futuro
Por otra parte, La presidenta de la asociación empresarial del Camp de Morvedre vuelve a insistir en la necesidad de prepararse: «Además, como territorio tenemos el reto de prepararnos para que las necesidades en personas y servicios de la gigafactoría no las tengan que importar de fuera o importen sólo lo imprescindible. Pero también tenemos el reto de acelerar en las infraestructuras que llevamos años reivindicando y en crear soluciones de movilidad sostenible y de conectividad con nuestros polígonos industriales. Estos retos sólo se pueden resolver con la colaboración público-privada».
Plumed es consciente de que se trata de una problemática de ámbito nacional, pero, pese a ello, afirma que: «debemos seguir trabajando para resolver la necesidad de perfiles cualificados y no cualificados en todos los sectores. El desajuste entre oferta y demanda de empleo es un drama, hay una tasa de abandono escolar creciente, de hasta un 40% en Formación Profesional, y, encima, tenemos unas tasas de desempleo muy altas. En concreto, en el Camp de Morvedre, se cerró el pasado noviembre con 5.492 personas desempleadas, de las que 4.361 eran de Sagunto. Es verdad que se han reducido los índices, pero todavía siguen siendo altos».
En este ámbito ya vienen trabajando desde ASECAM, tal y como detalla su presidenta: «En ASECAM estamos trabajando desde la comisión laboral y, en concreto, desde el GT de FP Dual, haciendo una detección conjunta de las necesidades de perfiles de nuestras empresas, y enlazar con la formación que necesitan estos perfiles, e ir un paso más allá en tener una comunicación más fluida, no sólo con los centros formativos, si no con las personas jóvenes, para transmitirles a través de las redes sociales en qué pueden trabajar y qué necesitan estudiar si quieren tener empleo en nuestro territorio».
Desde ASECAM, resalta Cristina Plumed que trabajan para reivindicar infraestructuras, en la detección de necesidades formativas, y en que las empresas se ocupen de la innovación y la sostenibilidad. En este sentido, resalta que: «El grupo de trabajo de hidrógeno verde en el que se plantea crear un valle de hidrógeno verde en Sagunto».
Clima complicado
En cuanto al contexto económico, con la guerra de Ucrania, el Conflicto en Gaza y sus repercusiones en el mar Rojo, donde la navegación está amenazada, Plumed es consciente de que: «el clima económico no es halagüeño y no podemos pensar que estamos en una burbuja aislada de los movimientos económicos globales, pues a pesar de la pronta llegada de la planta de baterías, somos vulnerables y competimos en un mercado global nacional e internacional y todas nuestras empresas son importantes y necesarias y no nos podemos permitir perder tejido productivo», advierte la principal responsable de ASECAM.
Concluye la presidenta de la asociación de empresarios del Camp de Morvedre, Cristina Plumed, animando a los emprendedores de su ámbito de influencia a: «seguir trabajando y escuchando lo global, para adaptarnos localmente y, si puede ser, tener proyectos pioneros que generen arraigo al territorio. Debemos establecer alianzas entre agentes económicos, sociales, administraciones y seguir caminando de la mano sin fisuras, por el bien común, el bien de nuestro territorio y las personas y empresas que habitan en él».
